EXTREMADURA ES UN PARAÍSO PARA LAS AVES Y LOS OBSERVADORES DE LA NATURALEZA
Ya sea en plena naturaleza o en núcleos urbanos, Extremadura está considerada uno de los mejores destinos de Europa para la observación de aves.
No solo en primavera sino durante todo el año.
Se trata de un rasgo que diferencia Extremadura de otros lugares y no faltan argumentos para ello:
- El 74,1% del territorio extremeño está incluido en el inventario de Áreas Importantes para las Aves, situación excepcional en España y Europa.
- Se ha registrado la impresionante cantidad de 369 especies sedentarias, estivales e invernantes.
- Existen más de 50 espacios protegidos, entre ellos, Monfragüe, Tajo Internacional y la Sierra de San Pedro, refugios clave para la conservación de algunas de las especies más amenazadas del continente, como el águila imperial ibérica, la cigüeña negra, el alimoche y el buitre negro.
- Y hay más de 70 Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), de las cuales 23 se localizan en entornos urbanos como Cáceres, Trujillo, Plasencia, el azud de Badajoz, Almendralejo, Zafra y Jerez de los Caballeros.
Con estos recursos naturales, Extremadura se ha especializado en recibir y dar servicio a un tipo de turista nacional e internacional que está interesado en las aves, los insectos y la botánica, sin descuidar en su visita aspectos como la cultura, el patrimonio histórico y la gastronomía. Alojamientos, guías profesionales, empresas de actividades, agencias de viajes, centros de interpretación y oficinas de turismo de toda la región se han unido en el Club Birding in Extremadura, iniciativa pionera en España y ejemplo de colaboración público-privada que trabaja para promocionar el turismo ornitológico y ofrecer un servicio de calidad al cliente.
Si te gusta la naturaleza, en Extremadura te sentirás en el paraíso.